¿No te pasa que de niño, el tiempo duraba más? Así mismo, las navidades y las vacaciones nos parecían lejanas, las semanas nos parecían meses, al iniciar cada día e ir al colegio, sin duda era una nueva aventura, no sabíamos que traería consigo, era interesante y divertido, al hacernos mayores quizá una hora puede ser un mínimo instante y cada año se acorta en comparación al anterior, el tiempo parece acelerarse porque, a medida que crecemos, vivimos cada vez menos eventos memorables.

A medida que transcurre el tiempo, más responsabilidades y preocupaciones van apareciendo en nuestra vida, que a su vez causan estrés, este mismo crea la sensación de que siempre nos queda poco, así es que la falta de novedades hace que los días y años pasen en un instante.

La rutina es una herramienta que adquirimos pues todos vivimos dentro de una rutina, por muy pequeña que sea, tenemos patrones que seguimos dentro de nuestro día a día, ya sea por nuestras comodidades, nuestros gustos o cualquier otro elemento que nos forme, dentro de una rutina pueden existir actividades que requieran de nuestra disciplina y responsabilidad, características super valiosas, dentro de esta misma rutina permítete un espacio para actividades diferentes, tuyas, divertidas y fuera de lo que regularmente haces, caer en la monotonía es lo que debemos evitar, pues la monotonía tiene mucho que ver con la tendencia natural del ser humano a hibernar, es decir, nuestra resistencia al cambio incluso  cuando sabemos  que el camino es equivocado, esto nos aburre, nos consume, no hay variedad y este factor invade de depresión a muchas personas, por eso aplica actividades geniales dentro de tu rutina y sal de la rutina.