¿Sabías de la existencia y

función de la glándula timo?

Ella se encuentra en la región superior del pecho, justo como la ves en la imagen y con la glándula timo sucede algo bastante interesante, crece cuando estamos alegres y se encoje a la mitad cuando estamos bajo mucho estrés, y se reduce aún más si estamos enfermos.

La forma de estimular esta glándula es aplicar unos pequeños golpes en el área del pecho, la glándula timo es el órgano principal del sistema linfático ya que su función principal es promover el desarrollo de los linfocitos que son específicos del sistema inmune o sistema de defensas, además, éstas células están relacionadas directamente con las células del corazón y a su vez con los sentidos, la conciencia y el lenguaje.

Su nombre en griego “Thýmos” significa energía vital, y por supuesto por su importancia en nuestro cuerpo y directamente con el sistema inmune y nuestro corazón nos otorga energía vital para poder vivir en calma y realmente en armonía a nivel fisiológico.

La glándula TIMO se encarga de comandar todas las funciones de defensa en nuestro cuerpo, muchas investigaciones han demostrado que esta pequeña e importante glándula esta increíblemente influenciada por los estados emocionales, el exceso de carga emocional baja o negativa hace que ésta disminuya su capacidad hasta casi un 50%, por esta razón se crean enfermedades en personas que viven estrés constante, disgustos excesivos y peleas frecuentes, mientras que la timo crece cuando estamos alegres y felices.

En un momento de la historia se creía que sólo funcionaba en la infancia y luego se “atrofiaba” pues en las autopsias siempre se encontraban achicadas y encogidas, dando como resultado la hipótesis de que dejase de trabajar a partir de la adolescencia, pero no es así, ella sigue siendo una glándula activa después de esta etapa, los pensamientos negativos que vamos adoptando al crecer tienen más poder sobre ella que los virus y las bacterias, dando paso a la reducción notable de su tamaño.

Una razón más para estimular nuestra energía dirigida hacía pensamientos positivos y vidas con un mayor control de estrés, el estrés no dejará de existir, pero nosotros podemos controlarlo para nuestro propio bienestar.